En la mañana del jueves 5 de septiembre de 2024, la sede de la Sociedad Rural Argentina (SRA), ubicada en el barrio de Palermo, se vio sacudida por un preocupante incidente. Un paquete explosivo dirigido al presidente de la entidad, Nicolás Pino, fue abierto por su secretaria, Pamela Sousa, provocando una detonación que generó alarma y la inmediata intervención de las autoridades.

El hecho, que movilizó tanto a la Policía de la Ciudad como a la Brigada de Explosivos, culminó con la hospitalización de cuatro personas, entre ellas Pino, Sousa, Marcelo Narvaez y Juan Harilaos, quienes fueron trasladados al Hospital Fernández para ser atendidos por precaución debido a la inhalación de humo. Afortunadamente, todos se encuentran fuera de peligro. Este incidente ha generado gran conmoción en la comunidad agropecuaria y en el entorno político, debido a los posibles móviles detrás del ataque.

El paquete explosivo
De acuerdo con fuentes policiales, el paquete fue entregado en la sede de la SRA, ubicada sobre la calle Juncal 4450. La encomienda iba dirigida a Nicolás Pino, un dirigente con amplio reconocimiento en el sector agropecuario, mientras que un segundo paquete, dirigido al vicepresidente de la entidad, Marcos Pereda, también fue motivo de sospechas, aunque finalmente resultó ser inofensivo. Este segundo paquete fue interceptado por la Brigada de Explosivos y destruido de forma controlada. Según los informes, no contenía material explosivo, sino un decodificador.

La situación se desató cuando la secretaria de Pino, al abrir el paquete, notó que liberaba una especie de humo o polvo blanco. Inmediatamente se activaron los protocolos de seguridad, evacuando la zona y llamando a las fuerzas de seguridad. Sousa sufrió una contusión menor en una mano producto de la explosión, mientras que las otras tres personas presentes inhalaron humo. Los cuatro fueron trasladados por el SAME al Hospital Fernández como medida preventiva, aunque sin heridas graves.

Intervención policial y judicial
El incidente llevó a un despliegue inmediato de las fuerzas de seguridad. El personal de la Comisaría Vecinal 14C de la Policía de la Ciudad acudió rápidamente al lugar, donde procedió a acordonar la zona y realizar las primeras investigaciones. Asimismo, la Brigada de Explosivos llevó a cabo un barrido en el edificio para asegurarse de que no hubiese otros artefactos explosivos.

El ministro de Seguridad de la Ciudad, Waldo Wolff, junto a su segundo, Diego Kravetz, se hicieron presentes en la escena para supervisar el operativo. Wolff explicó a los medios que el primer paquete, dirigido a Pino, contenía un artefacto explosivo artesanal con una carga capaz de generar daño moderado. El paquete estaba diseñado para estallar al ser abierto, lo cual ocasionó algunos daños en la oficina del presidente de la SRA, afectando su escritorio, computadora y papeles cercanos.

Por el momento, el caso está siendo investigado por el Juzgado Federal a cargo del juez Sebastián Casanello, quien está a cargo de determinar la procedencia del paquete y los posibles responsables. Según Wolff, el artefacto explosivo estaba claramente diseñado para detonar, ya que incluía un iniciador, una carga explosiva y una batería que funcionaba como fuente de energía. Sin embargo, hasta el momento no se ha confirmado la motivación detrás del atentado.

Comunicado de la Sociedad Rural
Tras el incidente, la Sociedad Rural Argentina emitió un comunicado oficial en el que informaba sobre lo sucedido y llamaba a la calma. “Desde la Sociedad Rural Argentina informamos que en el día de hoy en nuestra sede social hemos recibido un paquete que, al abrirlo, generó humo activando el protocolo de seguridad del edificio”, reza el comunicado.

Además, la entidad aclaró que ninguna de las personas involucradas resultó herida de gravedad y que todos los afectados estaban siendo atendidos por profesionales médicos como parte del protocolo. “Queremos transmitir tranquilidad a las familias de las autoridades y del equipo de trabajo, a los socios y a la ciudadanía de que todos nos encontramos en perfectas condiciones”, finaliza el texto.

El contexto político y social
Nicolás Pino es una figura clave en el sector agropecuario argentino y ha mantenido relaciones cercanas con el gobierno nacional. En varias ocasiones, ha compartido eventos con el presidente Javier Milei, con quien, según trascendió, mantiene una buena relación. Ambos dirigentes coincidieron en la inauguración de la tradicional Exposición Rural de Palermo en julio pasado, evento al que también asistió la vicepresidenta Victoria Villarruel.

El último encuentro público entre Pino y Milei fue hace apenas unos días, durante la celebración del Día de la Industria en la sede de la Unión Industrial Argentina (UIA). En ese evento, el presidente de la Nación lanzó un guiño a Pino al afirmar que los gobiernos anteriores habían “robado” al campo para proteger a la industria, comentario que fue recibido con una sonrisa cómplice por el líder agropecuario.

Este vínculo entre Pino y el gobierno ha generado especulaciones sobre los posibles móviles del ataque, aunque hasta el momento no se ha confirmado si el atentado tiene un trasfondo político o personal. La policía y las autoridades judiciales mantienen la investigación en curso y, por ahora, no se han divulgado teorías concretas sobre los responsables del envío del paquete explosivo.

Medidas de seguridad y próximas investigaciones
Tras lo ocurrido, la Policía de la Ciudad continúa realizando operativos en la zona, incluida una revisión exhaustiva del edificio de la Sociedad Rural y sus alrededores. “El lugar sigue cercado porque hubo un artefacto explosivo y las distintas fuerzas están haciendo un peinado en todo el edificio y en la zona para constatar que no haya otro artefacto”, explicó el ministro Wolff en declaraciones a la prensa.

La División Antibombas y la División Antiterrorismo de la Policía de la Ciudad están trabajando conjuntamente para garantizar la seguridad en la zona y prevenir nuevos incidentes. De momento, las autoridades han solicitado a la ciudadanía que mantenga la calma y han reforzado las medidas de seguridad en torno a las instalaciones de la Sociedad Rural.

Aunque el panorama es incierto, la investigación judicial se encuentra en una etapa preliminar. El Juzgado Federal de Casanello se ha abstenido de formular hipótesis públicas sobre el incidente, pero se espera que en los próximos días se conozcan más detalles sobre el origen del paquete explosivo y sus posibles motivaciones.

Este episodio ha generado un fuerte impacto no solo en el ámbito agropecuario, sino también en el entorno político, donde las especulaciones sobre los motivos detrás del ataque siguen siendo objeto de debate. Mientras tanto, Nicolás Pino y los demás afectados continúan bajo observación médica, aunque todos se encuentran fuera de peligro.